Cerramos nuestro mes mitológico con la ironía concentrada de estas poquitas palabras de Gabriel Bevilaqua que encierran muchas claves de nuestro mundo actual. Y todo porque el pobre Prometeo quiso llevar la luz y el calor del fuego a los hombres…
El mito de Prometeo a la luz de la postmodernidad
Desde que se instruyó sobre la teoría de la oferta y la demanda, el buitre amasó una enorme fortuna en el mercado negro de órganos.
Buena adaptación a los tiempos actuales.
ResponderEliminarMe has sacado una sonrisa, Gabriel.
Saludos afectuosos.
jejejeje¡ buena ironia, y no menos cierta.
ResponderEliminarUn saludo.
Muy cierto, Gabriel, muy cierto, tú lo has contado en pocas palabras.
ResponderEliminarBesitos
Prometeo es mi mito favorito...me encantaba cuando me lo contaban y llegaban al punto ese de "...en cambio Epimeteo, cuyo nombre significa el que reflexiona tarde" Todos somos Epimeteos atrapados por los buitres, bueno, tú no. Tú eres mago :)
ResponderEliminarUn beso
Isabel, Anna y Elysa, muchas gracias. Un placer que les haya gustado.
ResponderEliminarAlma :)
Saludos