EL NADADOR
Salta el nadador sobre el mar.
Con sólo su cuerpo, se precipita al vacío.
Cobrizo y ágil, se lanza resuelto.
No hay más.
Columnas, las ramas de un árbol, tal vez un jarrón.
Todo le sobra.
Quiere, como única cosa, sentir el aire,
el sol y el agua en su piel.
Sobre la pared de una tumba, alguien soñó este hombre.
Un hombre solo, vuela,
y por unos instantes el mundo es suyo.
Y gracias a quien lo pintó,
podemos saber ahora de un hombre que quedó para siempre
suspendido en un soplo divino.
La inmortalidad de un gesto, el grácil vuelo que lo convierte en dios para la eternidad y el aire que lo festeja.
ResponderEliminarTu mirada, Virgi, siempre capta lo esencial y tu lirismo atraviesa y nunca deja indiferente, siempre seduce.
Un abrazo.
Traes a la memoria la figura de la "tumba del zambullidor", de ese atleta que se sumerge en el agua; tal vez emulando lo que el difunto era o lo que queria encontrarse en la reencanación de su vida....quedó para siempre plasmado en aquella pintura aquel instante de volar en el espacio.
ResponderEliminarMe gusta.
Ver este salto y leer mis letras.
ResponderEliminarUn placer al caer la tarde, mientras Il Tuffatore se zambulle y las leyendas nutren nuestra historia.
Montón de gracias.
Nadando en el aire con poesía.
ResponderEliminarSaludos
Precioso relato Virgi.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Si me encanta la pintura, también me llena la poesía. Tan sugerente y llena de naturaleza: aire, sol, agua, piel... lo que en definitiva nos va llenando para confortar, si cabe, parte de nuestra vida. Siempre hermoso. Un beso. Tanci
ResponderEliminarSiempre es un gusto leerte.
ResponderEliminar:))
Gracias, lindas chicas, por las palabras afectuosas. Muchos besos.
ResponderEliminar· ¡Que placer verte por aquí, que esto parece ser Cantabria..!
De tus palabras no digo nada que ya no sepas.
· Saludos, hoy, desde los hayedos desnudos
CR & LMA
________________________________
·
Un artista, un misterio, una vida, y la dulzura en una poesía maravillosa.
ResponderEliminarTu visión del arte y del mundo es un don inestimable querida Virgi.
Un abrazo