OFRENDA A LAS MUSAS
Cierro la maleta. La emoción acampa en mi estómago llenándolo de mariposas. Estoy a punto de tocar mi sueño: Grecia. Me encontraré con el viejo mundo, pero sobre todo, me encontraré con ellas. Subiré al Templo de Apolo y allí las esperaré. Sé que a la caída de la tarde acudirán a mi llamada. Se harán humanas y tomarán mi ofrenda: mis cuentos, mis novelas, mis poemas…, ellas los inspiraron, son un poquito suyos, les pediré que se los lleven a su mundo y sean lectura de dioses. Serán así divinos: lo que para ellos soñé.
Ojalá se cumpla tu deseo, aunque me temo que en Grecia las musas deben estar estos días muy solicitadas...Buen micro
ResponderEliminarUn saludo.
Pues ellas vendran a verte, claro que si...
ResponderEliminarMis saludos.
No necesitas la aprobación de los dioses. Si a ti te parecen divinos, lo son.
ResponderEliminarUn abrazo.
Confía en ellas, en las musas, y tus micros tocarán el cielo plagado de Dioses. Porque ... ¿están allí arriba, verdad?. ;-).
ResponderEliminarUn abrazo Yolanda.
Muy bueno, Yolanda, todavía con la inspiración de aquellas musas que compartimos. Un abrazo.
ResponderEliminarCreo que las tienes contigo. Me ha gustado.
ResponderEliminarEnhorabuena
Gracias a todos- :)
ResponderEliminarQue se cumpla tu sueño y los dioses te sean propicios, Yolanda, pues las Musas ya lo han sido.
ResponderEliminarUn micro muy literario, con el anhelo que todos llevamos de ser mirados por los ojos de los dioses.
Un abrazo.
Gracias Isabel :)
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