Hoy, por exigencias técnicas, volvemos tener una sesión doble de relatos. Comenzamos con la contundencia de lo preciso y escueto. Las explicaciones están de más cuando ya está todo dicho desde hace tiempo… eso parece decirnos Isabel Martínez en este comprimido.
LAS DOCE PALABRAS
Sonaron las doce campanadas y, con ellas, las doce palabras que llevaba ensayadas desde hacía doce meses:
–Te supuse amable, craso error. Hasta aquí ha llegado mi paciencia contigo.
Doce segundos después, él/la desafortunad@ comenzó a llorar desconsoladamente...Suerte y un saludo.
ResponderEliminarInteligente idea la de asociar las doce campanadas con doce palabras que sentenciarán la vida de una persona.
ResponderEliminarSaludos.
Un racimo de palabras para terminar una relación. Original.
ResponderEliminarUn saludo
Muchas gracias a Euro-pa-labra por la publicación y a vosotras tres por vuestros comentarios.
ResponderEliminarAbrazos.
Ya quisiéramos tener siempre esa claridad y concisión para pasar página.
ResponderEliminarMuchos besos, Isabel.
El doce es un número mágico :D
ResponderEliminarUn beso, Isabel
Sí, Virgi, ya nos convendría muchas veces ser tan ejecutivas para espantar moscones y demás fauna, ¿verdad?
ResponderEliminarNo sabía que el 12 fuera un número mágico, Alma, aunque todos los números pueden tener magia. ¿Te gusta la Kábala?
Hay frases breves que matan y si como en este caso es en doce palabras y tras doce campanadas, pues ¡viva el año nuevo, la vida nueva y oye ...algo habría hecho el 'dejado' o dejada'!.
ResponderEliminarun beso des
demispalabrasylasvuestras.
Seguro, Laura, algo habría hecho para merecer semejante contundencia regida por el doce.
ResponderEliminarOtro beso para ti y gracias por tu comentario.
Un micro certero, original y muy bien hilvanado.
ResponderEliminarY una forma contundente de acabar un año y empezar otro, doce que acaban, doce que empiezan y doce palabras como colofón.
Me quito el sombrero, mi querida Isabel, y me inclino ante tu genialidad con las letras.
Un abrazo cariñoso.
UNA IMPORTANTE DECICIÓN EN DOCE PALABRAS. ME HA GUSTADO.UN BESO AMIGA
ResponderEliminarJuglar, en ocasiones bastan muy pocas palabras para sacudirse de encima aquellas personas que nos hacen mal, aunque la decisión haya sido producto de largas reflexiones en el tiempo.
ResponderEliminarGracias por tu comentario (se me han subido los colores, pero me aúpa).
Otro abrazo con todo mi cariño para ti.
Maruja, gracias por tu comentario, por leerme, por estar.
Recibe un fortísimo abrazo.
Amable: digno de ser amado. (DRAE)
ResponderEliminar-Reconozco haberlo comprobado-:
Micro, perfecto!
Gracias, José Antonio, eres muy amable.
ResponderEliminarUn saludo afectuoso.
Poco que comentar. Contundente. ¿Oyó alguna?
ResponderEliminarJajaja, Ximens, no me lo había planteado, pero a saber si las oyó. Tal vez las campanadas se lo impidieron.
ResponderEliminarGracias, majísimo.
Un gran abrazo y mis mejores deseos para ti en el año recién estrenado.