Confusión
A mi me empiezan a entrar dudas nada más notar que perdemos el contacto con la carretera inexplicablemente.
La situación empeora cuando mi madre se pone a gritar como una loca, mi hermana, pálida, me agarra la mano con fuerza y a mi se me hace un nudo en la garganta que apenas me permite respirar.
La voz del piloto intenta tranquilizarnos argumentando que lo tiene todo bajo control.
Pero a través de la ventanilla podemos apreciar cómo la velocidad de caída es cada vez mayor.
Y ya no me puedo callar. ¡Papá! ¡Los coches no vuelan!
Muy divertido!!
ResponderEliminarTe deja comiéndote la cabeza. ¿es un avión, es un coche que vuela? Si es un coche que vuela, mala cosa... Divertido.
ResponderEliminarLos padres, que siempre lo tienen todo bajo control.....
ResponderEliminarPues a mí, con el miedo que tengo a volar, me has puesto los pelos de punta... no le veo ninguna, pero que ninguna gracia...
ResponderEliminarBesos.
Y es que los padres son...
ResponderEliminarBlogsaludos